








Se que corro riesgo de muerte al escribir este post, porque mientras que dudo que nadie tenga en su casa un ornitorrinco o un pez mandarín, puede que alguien si que posea un gato sphynx de estos y me odie para siempre. Por si alguien lo duda, no pienso que estos animales sean malos, tontos o merezcan morir, pero si creo que son feos. Asumidlo.
El gato sphynx, como podeis comprobar en la foto, carece de pelo. De hecho puede que cualquier gato del universo pueda ser un gato sphynx si coges la maquinilla de afeitar de Beckham y le rapas al cero. pero el gato sphynx es así de fábrica.
Su gran parecido con un pollo de Carrefour a punto de ser cocinado le convierte en un misteriosos animal al que se le han atribuido toda clase de poderes mágicos 8esto es invención mía, pero queda bastante bien) El gato sphynx es un agradable compañero de fatigas y, al contrario que los gatos persa, no convertirá tu casa en una peletería y conseguirá que los niños del primero jamás vuelvan a tu casa a pedir sal.
¿Quién dijo que los animales amorfos no valen para nada? Sin duda alguien con mucho pelo.